Insectos

Cómo proteger tu casa con medidas de exclusión contra insectos durante el invierno

Aunque el invierno suele traer menos insectos que el verano, muchas especies buscan refugio en lugares cálidos como hogares, gimnasios y centros deportivos. Una vez dentro, pueden convertirse en una molestia y afectar la higiene de los espacios.

La buena noticia es que hay medidas simples y efectivas para mantenerlos fuera incluso en los meses fríos:

Mallas mosquiteras: no solo sirven en verano; instalarlas en ventanas y ventilaciones evita que insectos pequeños aprovechen corrientes de aire para entrar.

Cortinas de lamas plásticas: ideales para accesos con mucho tránsito, ya que ayudan a mantener el calor adentro y bloquean el paso de insectos.
Cierres automáticos de puertas: evitan que las puertas queden abiertas por descuido, manteniendo a raya el frío… y a las plagas.

Combinadas con una limpieza constante y la revisión de grietas o rendijas, estas medidas ayudan a que el invierno sea más confortable y seguro para todos.

En definitiva, el invierno no es excusa para bajar la guardia: prevenir la entrada de insectos es clave para mantener espacios limpios y saludables todo el año.

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